martes, 3 de julio de 2012

JP

Y al final de cuentas todo se reduce a que nos hicimos tanto daño que lejos estamos mejor...
y no niego que muero de miedo por lo que el futuro pueda traer
 y así como el demonio que vive en mí, me susurra al oído que
puedo quedarme sola, que estoy cometiendo una locura,
que nunca nadie me amará como tú;
así el ángel bueno me dice que no tema, que viva la vida como la aventura que es,
que hay algo mejor en el camino...
Al final de cuentas, aquí estamos buscando pretextos para seguir haciéndonos daño,
por temor a lo desconocido, con amenazas estúpidas y sin fundamento porque aunque lo niegue será difícil olvidarte...
y sé que te mereces lo mejor, eres la mejor persona que conocí jamás, pero tu error fue enamorarte de la persona equivocada, enamorarte de mí...
hubieses escogido a alguien normal, alguien tan perfecto como tú, 
pero escogiste la peor opción: yo
y al final de cuentas aquí estoy haciendo un esfuerzo por no llamarte, 
repitiéndome a mí misma que es lo mejor
intentando pensar en algo más, pensar en todo menos en tí
porque pensar en ti, es pensar en ella también
pensar que podrás ser feliz al fin con alguien más
y muero de celos, pero debo recordarme que es lo mejor
que últimamente nos hacíamos más daño
que con tus últimas confesiones de sentimientos terminé con la navaja en mi piel nuevamente
que no quiero más daño
que no somos el uno para el otro...

No hay comentarios:

Publicar un comentario